Análisis agronómicos

Los análisis agronómicos son imprescindibles para una buena gestión de la explotación agrícola, tanto económicamente como medioambientalmente.

La información que aportan los análisis agronómicos (suelos, hojas y agua) fundamenta la toma de decisiones en el campo, previenen situaciones de deterioro o perdida de producción, diagnostican problemas ya existentes o previenen la aparición de otros, en cualquier caso permiten gestionar las explotaciones de formar racional y sostenible.

Análisis de hojas

Diagnostica carencias o excesos de nutrientes en los cultivos

Más información

Análisis de suelos agrícolas

Evalúa las características y la idoneidad del suelo para cultivos

Más información

Análisis de agua de riego

Informa de su idoneidad para un cultivo y los riesgos para el suelo

Más información

¿Cómo se toma la muestra de hojas de olivo?

Para tomar la muestra de hojas correctamente le aconsejamos que revise el Protocolo para la toma de muestra de hojas de olivo

Para la toma de muestras de hoja de cualquier otro cultivo diferente al olivo le aconsejamos que se ponga en contacto con OLIVARUM.

Análisis de hojas

¿En qué consiste el análisis de hojas?

El análisis de hojas o foliar es una herramienta que nos ayuda en el diagnóstico nutricional de un cultivo, al poner de manifiesto las carencias de nutrientes o los excesos de estos en las plantas. Por dicha razón es necesario realizar un toma de muestras adaptada al tipo de cultivo, ya que los valores de referencia que permiten hacer el diagnostico se han obtenido gracias a trabajos de investigación científica y se han establecido para un periodo en concreto y para un método de muestreo también concreto.

Protocolo para la toma de muestra de hojas de olivo Descargar formulario análisis DE HOJAS

¿Cuál es el interés de analizar las hojas?

Las hojas de cualquier planta y en particular del olivo son los principales centros de metabolismo, capaces de actuar como órganos de almacenamiento de nutrientes, de modo que los cambios que hagamos a la hora de la nutrición, por ejemplo a través del abonado, se van a reflejar en la composición de la hoja. Por todo ello un análisis foliar nos permite:

Evaluar el estado nutricional de una plantación.

Detectar los valores bajos de los nutrientes antes de que aparezcan efectos perjudiciales.

Comprobar si el cultivo responde correctamente a los programas de abonado.

Detectar fitotoxicidades por algunos elementos como el boro o el sodio, por ejemplo.

Tiene sin embargo sus limitaciones, ya que por ejemplo el hierro no es posible diagnosticarlo correctamente ya que no hay una relación entre los resultados de un análisis y la situación observada en campo.

¿Cuál es el momento idóneo para analizar las hojas?

Puede variar en función del cultivo, pero en el caso del olivar se han establecido para épocas en las que hay una cierta estabilidad analítica, fijándose estos durante el mes de julio y también durante el reposo invernal. Sin embargo utilizaremos el mes de julio para hacer los muestreos, no solo porque es el momento para el cual tenemos valores de referencia, sino porque hay razones de tipo fisiológicas que dificultan la interpretación de resultados de los análisis realizados durante los meses de reposo invernal.

En la siguiente tabla reflejamos los momentos apropiados de muestreo para algunos cultivos.

CULTIVOFECHA DE MUESTREO
OLIVOJULIO
ALMENDROJULIO
PISTACHOAGOSTO
CITRICOSSEPTIEMBRE-NOVIEMBRE
VIDFLORACION Y ENVERO

Al tener cada cultivo su momento adecuado para el diagnóstico, con sus correspondientes valores de referencia para esa fecha, no se pueden utilizar estos valores para un análisis cuyas muestras se han recogido en fechas diferentes a las indicadas, ya que el contenido de los nutrientes evolucionan en la hoja a lo largo del año y por tanto no serian aplicables.

Análisis de suelos agrícolas

¿Qué es el suelo?

El suelo es la capa más superficial de la corteza terrestre, que se ha formado muy lentamente, a través de los siglos; en su formación han intervenido procesos geológicos, meteorológicos y biológicos. Está compuesto por minerales, materia orgánica, diminutos organismos vegetales y animales, aire y agua.

El perfil del suelo es un corte vertical en el terreno a través del cual podemos reconocer los diferentes horizontes que lo constituye, cada uno de los cuales suele tener características y propiedades diferentes en un mismo suelo.

Protocolo para la toma de muestra de suelos Descargar formulario análisis de suelos

¿Cuál es el interés de analizar los suelos?

El análisis de suelos nos permite:

Determinar la idoneidad de un suelo para cierto cultivo.

Obtener información sobre su textura y estructura, de lo que podemos deducir cuestiones importantes como es la estrategia más adecuada para aprovechar mejor el agua de riego.

Nos permite prever futuros problemas nutricionales, como son las deficiencias de fósforo, hierro, manganeso, etc.

Conocer la capacidad de almacenamiento de nutrientes en el suelo y con ello podemos fijar una forma de aplicación de los nutrientes de manera más aprovechable para la planta.

Determinar posibles antagonismos entre elementos.

¿Con que frecuencia se recomienda analizar el suelo?

Es recomendable, de forma general, analizar el suelo cada 5 años, salvo que se estén realizando cambios en el manejo y se quiera comprobar la evolución de este, por ejemplo al incorporar cubiertas vegetales u otras mejoras.

¿Cuál es el momento idóneo para analizar el suelo?

No hay un momento concreto para el análisis de los suelos, se puede hacer el análisis durante todo el año, pero es aconsejable hacerlo cuando la muestra es más fácil de tomar, es decir, durante el otoño, el invierno y si ha llovido, durante la primavera también es un buen momento. Evitaremos el verano por la dificultad que plantea tomar la muestra.

¿Cómo se toma la muestra de suelos?

Para tomar la muestra de agua correctamente le aconsejamos que revise el Protocolo para la toma de muestra de suelos

¿Cómo se toma la muestra de agua?

Para tomar la muestra de agua correctamente le aconsejamos que revise el Protocolo para la toma de muestra de aguas de riego

Análisis de aguas de riego

El riego realizado de forma racional genera un gran beneficio en una explotación, que se concreta en un aumento y regularización de la producción, de forma que no esté sujeta  a las condiciones climatológicas.

En zonas áridas y semiáridas se dedica una parte importante de los recursos hídricos al riego, por lo que al tratarse de un bien muy limitado debería optimizarse su uso. Por otro lado es de enorme importancia comprobar la calidad del agua con el objeto de prevenir los problemas que podría generar el riego con agua de mala calidad, no solo por sus efectos sobre el cultivo sino también sobre el suelo.

Protocolo para la toma de muestra de aguas de riego Descargar formulario análisis de aguas de riego

Centrándonos en el olivo hay momentos de su fenología en los que es muy importante que no exista déficit hídrico, estos son:

Desde el inicio de la brotación (tanto de las yemas de madera como de las de flor) y hasta la floración, con ello se asegura, por un lado la cosecha, al permitir la producción de una buena calidad de la flor y con ello un buen número de frutos cuajados. Y por otro, el crecimiento vegetativo suficiente para producir un buen número de hojas que sinteticen asimilados para mantener una buena cosecha presente y a la vez que puedan ser portadores de los órganos florales y fructíferos de la campaña siguiente.

Desde el inicio del crecimiento del fruto y hasta el endurecimiento del hueso, para evitar la caída fisiológica de frutos.

Durante la maduración del fruto.

Estas premisas han servido para diseñar una estrategia con dotaciones de riego inferiores a la teórica demanda máxima del cultivo y que se conocen como Riego Deficitario Controlado (Pastor et al., 1999) (Pastor et al., 2002).

¿Qué información nos aporta un análisis de agua de riego?

Nos informa acerca de su idoneidad para cada cultivo en concreto.

Nos informa de posibles situaciones de deficiencias nutricionales a causa de bloqueos de nutrientes como es el caso de un agua con contenido alto de bicarbonatos caso en el debemos poner atención en la nutrición del hierro.

Nos informa de la presencia de iones que pueden inferir toxicidad como el sodio y el boro.

Podremos prever situaciones de obturación de emisores o agresión a la instalación de riego.

Podremos prever situaciones de antagonismos o sinergismos entre elementos nutritivos.

Podremos valorar los posibles riesgos de procesos como la salinización y/o la desestructuración del suelo.

¿Cuál es la frecuencia y el momento idóneo para realizar el análisis de agua para riego?

Se puede analizar en cualquier momento pero es recomendable hacerlo de forma previa al inicio de cada campaña de riego.

Si el agua procede de acequias, ríos o arroyos es recomendable analizar varias muestras a lo largo de la campaña, al menos hasta caracterizar la variación anual de la calidad del agua.